Ulises Francisco Espaillat, expresidente de la República Dominicana

Ulises Francisco Espaillat.jpg

Ulises Francisco Espaillat: Hombre de profundas convicciones éticas y de respeto absoluto a las libertades públicas. Su ejemplo como patriota, político y maestro, honesto, progresista y democrático, nos llena de orgullo como dominicanos. Por todas las virtudes de este prohombre de la patria, se instituye el Día Nacional de la Ética Ciudadana, mediante el Decreto 252-05, a ser celebrado cada año, el 29 de abril.

Nació en Santiago de los Caballeros, el 9 de febrero de 1823. Fue maestro, dominaba los idiomas inglés y francés,  panadero, destilador de alcoholes, médico, boticario, escritor, munícipe, legislador, diplomático, secretario de Estado, Vice presidente de la República y finalmente, Presidente de la República. Pero lo que más lo enaltece y por lo que lo recordamos es que era un hombre de acrisoladas virtudes cívicas, éticas y morales.

Durante los mandatos de Báez sufre persecución y cárcel y al término de la Guerra de los Seis Años, es puesto en libertad y regresa a Santiago. Desde donde desarrolla una importante labor cívica que aumenta el respeto y la admiración por su persona.

Hostos lo consideraba el hombre más digno del ejercicio del Poder que ha tenido el país.  Desde la ciudad capital se le reclama para que sea candidato a la presidencia y el clamor se hace nacional. En marzo de 1876 acepta la candidatura. El 15 de abril de ese año, la Cámara Legislativa lo proclama Presidente electo por la cantidad de 24,000 votos. Se traslada de Santiago a Santo Domingo, acompañado de impresionante comitiva que recorre las comunidades de Moca, La Vega, San Francisco de Macorís y Cotuí, llegando a la capital el 27 de abril a las 10 de la mañana siendo objeto de un cálido recibimiento.

Espaillat prefirió sacrificar la tranquilidad de su hogar para servirle a los más puros intereses patrios.  La decepción debió ser inconmensurable para aquel espíritu noble, de quien se puede decir que cuando al cabo de un breve lapso se vio precisado a abdicar del poder, que no había buscado, porque las pasiones políticas le indujeron a ello, debió haber experimentado una suerte de asfixia moral.

Su gabinete estuvo compuesto por Manuel de Jesús Peña y Reynoso como Ministro de Interior y Policía; Manuel de Jesús Galván como Ministro de Relaciones Exteriores; José Gabriel García como Ministro de Justicia e Instrucción Pública; Mariano Cestero, en Hacienda y Comercio y Gregorio Luperón como Ministro de Guerra y Marina. Este gabinete es conocido como el "Gabinete de los Apóstoles" por ser considerado por varios historiadores como el más excelso, completo y luminoso que ha estructurado un gobernante en la historia de la República Dominicana. ​ Su ejercicio del poder apenas duró cinco meses y cinco días. Desde el 29 de abril, al 5 de octubre de 1876.

Su gobierno patriótico, honesto, progresista y democrático fue derrocado por una asonada militar, expresión de la intolerancia y anarquía de las diferentes capas de la pequeña burguesía, con cincuenta años bien cumplidos, regresó a su pueblo natal el gran prócer republicano derrotado por la ignorancia y el atraso político. Murió en Santiago el 25 de abril de 1878 rodeado de la admiración y el respeto de todos sus compueblanos. El Congreso Nacional mediante Decreto No. 1663​ de fecha de mayo de 1878 se dispuso a guardar 13 días de duelo por su fallecimiento. Su ejemplo como patriota, político y maestro llena de orgullo a los dominicanos.

Servicios
  • Tránsito Terrestre
  • Tramitación de Planos
  • Edificaciones
  • Reglamentos Sistemas
  • Planificación y desarrollo
  • Mantenimiento y Supervisión de Peajes Nacionales
  • Carreteras y Caminos Vecinales
  • Supervisión y Fiscalización de Obras
  • Equipos y Transporte
  • Gestión Ambiental y de Riesgos
  • Comisión Militar
  • Inspección de Edificaciones Privadas